Durante la tarde de hoy se ha producido un nuevo crimen de guerra en Gaza en el marco del ataque genocida del estado sionista de Israel sobre Palestina, esta vez el objetivo ha sido el hospital de Al-Wafa (Gaza), sobre el cual han impactado cuatro morteros que han dejado el edificio en ruinas.
Durante el ataque, en el hospital se encontraban enfermos, personal sanitario y ocho brigadistas internacionales, personas que están actuando como verdaderos escudos humanos en territorio de riesgo, que pese a las amenaza de ataque al hospital, han permanecido en él para provocar un alto el fuego que no se ha producido y que en estos momentos están informando con dificultades desde las inmediaciones del lugar del ataque.
Entre los ocho brigadistas internacionales se encuentra Manu Pineda, camarada del PCE e Izquierda Unida y desplazado a Gaza en nombre de la asociación Unadikum (Asociación Paz, Igualdad y Solidaridad Internacional), desde donde transmite diariamente los efectos de la agresión sionista.
Este ataque se suma a una oleada de violencia indiscriminada que Israel está llevando a cabo en territorio palestino desde hace varios días y que se intensifica por momentos, siendo los últimos ataques el producido al hospital de Al-Wafa y el asesinato de cuatro niños en la costa de Gaza.
Desde la UJCE denunciamos la política del terror que lleva a cabo Israel mediante el sionismo, la ocupación y las operaciones de castigo que, como esta última basada en la muerte de tres colonos, se saldan con crímenes de guerra que se traducen en cientos de muertos, miles de heridos, destrucción de viviendas e infraestructuras sanitarias.
Una operación que, en definitiva, tiene por objetivo llevar a cabo una limpieza étnica en Palestina.
Condenamos la impunidad con la que actúa Israel, contando con el silencio internacional que una vez más se convierte en cómplice de la masacre y del miedo, cómplices de la situación que padecen miles de personas en Palestina desde el inicio de la ocupación y que cuenta con el papel aliado de unos medios de comunicación que manipulan la realidad de los crímenes de guerra, propagando informaciones de apoyo al estado sionista y criminal de Israel.
Además, hacemos responsable al estado español de la integridad física del brigadista español, señalándolo como cómplice de los ataques genocias del ejercito de Israel. Denunciamos la actuación que está llevando a cabo el consulado de España en Jerusalem, haciendo oídos sordos a los ataques que está sufriendo la población palestina y denegando todo tipo de ayuda al brigadista español que se encuentra en Gaza. Nos avergüenza el comportamiento de quienes una vez más se miran para otro lado cuando se habla de Palestina, que se lava las manos ante las demandas de una persona española en territorio de ataque y que ni siquiera condena los crímenes de guerra que está llevando a cabo Israel, a sabiendas de que el apoyo internacional es un factor crucial para que se dé el alto el fuego.
Hacemos un llamamiento a la solidaridad con el pueblo palestino y la difusión por todas las vías posibles de lo que está ocurriendo ahora mismo en Gaza, rompiendo así con la manipulación mediática que está intoxicando la realidad y colocando a víctima y verdugo al mismo nivel.
Resaltamos además el papel de los brigadistas internacionales que, aun a riesgo de perder su propia, luchan para que las voces silenciadas del conflicto sean escuchadas, siendo un ejemplo de dignidad que nos enorgullece en la distancia.
Exigimos el cese de la violencia y el fin de la ocupación: PALESTINA VENCERÁ