Desde los altavoces del capital se nos está intentando transmitir la idea de que estas serán las navidades de la recuperación económica. No es casualidad que utilicen estas fechas, en las que un pulso de demanda puede ser utilizado para vender una recuperación económica que no existe. El presidente del gobierno, en un derroche de optimismo, y refiriéndose al Estado español, dijo: “somos el que más empleo está creando”.
¿Cuál es la realidad que se esconde tras esas cifras? Más que una recuperación económica podemos hablar de un asentamiento en unas condiciones de temporalidad, paro y precariedad. Nos esperan una época marcada por la entrada y salida en el mercado laboral y la reforma laboral del gobierno de Rajoy y las medidas impuestas por la Troika, favorecen esa situación. Sirva como radiografía de la situación el hecho de que el 24 % de la población activa está en paro, el 24,6 % tiene un contrato temporal y el 15 % trabaja a tiempo parcial.
En cuanto a la juventud, la situación se vuelve más aguda. Según palabras pronunciadas por Angela Merkel el pasado 4 de diciembre: “Europa no es ahora mismo una tierra de futuro para los jóvenes”. Merkel no se equivoca, en el Estado español, la tasa de paro según la EPA para el tercer trimestre de 2014 era de 52,39 %. Estas sangrantes estadísticas nos dejan poca elección respecto a nuestro futuro, emigrar a otro país o condenarse al paro y la precariedad.
Las campañas estivales y navideñas son un ejemplo ilustrativo de esa situación de precariedad. Según fuentes del Ministerio de Trabajo, en el año 2013 el paro descendió un 2,23 % en diciembre en todo el Estado, de los cuáles tan sólo un 6,5 % de los contratos realizados fueron indefinidos. El descenso del paro en estos periodos vacacionales son poco más que una ilusión. Los puestos de trabajo, se centran en el sector del comercio y las ventas, sector en el que se ceba la precariedad, y cuyos trabajadores, a menudo, son obligados a trabajar en festivos, como vienen denunciando los sindicatos de esas empresas. Por ello, hacemos un llamamiento a no acudir a los centros comerciales en días festivos.
Las perspectivas económicas en general siguen siendo pesimistas, a pesar de los discursos del ejecutivo. No se aplican medidas para contrarrestar esta tendencia dentro del mercado laboral, al contrario, se insiste incluso de palabra, en que ese es el camino y la perspectiva para la juventud es la de no poder encontrar un puesto de trabajo digno que garantice el desarrollo de una carrera profesional plena y por tanto, de una vida digna. La Juventud Comunista en Asturies denunciamos esta situación de precariedad y paro y culpabilizamos de ello a los capitalistas internacionales y al gobierno por ahondar en esa situación.
Por otra parte es de sobra conocida la explotación laboral no sólo en nuestro Estado durante estas fechas, sino también en los países del Tercer Mundo donde se producen los juguetes y demás artículos tan cotizados durante estas fechas.
¡NO A VUESTRA NAVIDAD!
¡NO A LA PRECARIEDAD LABORAL!