565 trabajadores y trabajadoras perdieron la vida durante 2014 mientras trabajaban o mientras acudían a su puesto de trabajo. La patronal y los gobiernos que les amparan siguen saliendo impunes. Esto revela que siguen sin cumplirse las normativas de seguridad que podrían evitar muchas de estas muertes.
Pero no son sólo la falta de medidas de seguridad sino que las mismas condiciones contractuales y la precarización continua y constante incide también en que tantos trabajadores pierdan la vida. No solamente se trata de fallecidos, pues durante el 2014 aumentaron los accidentes laborales con respecto al año pasado, un total de 482.578 accidentes que dieron baja.
Como vemos, año tras año aumentan los accidentes laborales y sin embargo la patronal, el gobierno y sus voceros tratan de dar la imagen de lo contrario. En este contexto de crisis, y con la reforma laboral como marco legal, la impunidad ante los accidentes y su aumento van de la mano.
Desde la Unión de Juventudes Comunistas de España (UJCE) manifestamos que bajo el capitalismo, donde priman los intereses de la patronal por encima de cualquier otro, tanto los accidentes laborales como la falta de seguridad en el trabajo, son elementos imposibles de erradicar. Pero a pesar de ello, debemos exigir que la salud y la seguridad en el trabajo se consideren como una prioridad, que se pongan los medios necesarios para luchar contra la siniestralidad laboral y que se persigan y castiguen severamente todos y cada uno de los delitos o imprudencias que repercutan en la salud de los y las trabajadores/as.