Desde la UJCE en Extremadura queremos mostrar todo nuestro apoyo a nuestras camaradas Pedro y Alicia, que fueron identificadas y sancionadas con más de 600 euros cada una por dar voz a las compañeras del Encierro Dignidad.
Comunicado de apoyo a Pedro y Alicia.
Desde la UJCE en Extremadura queremos mostrar todo nuestro apoyo a nuestras camaradas Pedro y Alicia, que fueron identificadas y sancionadas con más de 600 euros cada una por dar voz a las compañeras del Encierro Dignidad.
El Encierro Dignidad fue un espacio de lucha donde se unieron activistas de la PAH, Campamentos Dignidad, Red de Solidaridad Popular, y de la Plataforma de Paradas y Parados de Cáceres para encerrarse en una iglesia de la ciudad de Cáceres el pasado mes de diciembre, bajo la reivindicación de “Pan, Trabajo, Techo y Dignidad.”
Durante esos días, representantes del Encierro dignidad acudieron a todos los grupos municipales para exponerles que no se conformaran con la propuesta del PP y Ciudadanos de aceptar solamente 60 de los 163 puestos de trabajo que la Junta de Extremadura otorgaba al Ayuntamiento de Cáceres dedicados al Plan de Empleo Social. Desde la UJCE sabemos que estos planes de empleo son claramente insuficientes, meros parches que no sirven para sacar de la miseria a una ciudad con más de 11.000 parados como Cáceres, pero resulta un atropello más para esos 11.000 parados que se niegue, desde la comodidad de un asiento en el gobierno, la posibilidad de acceder a esos puestos de trabajo. Es por ello que el día de la votación para este plan de empleo, las integrantes del encierro Dignidad acudieron al Pleno Municipal para exponer sus reivindicaciones, siendo finalmente víctimas de la represión de la Ley Mordaza.
Se les acusa de “perturbación de la seguridad ciudadana en actos públicos”, contemplada como una infracción grave en la Ley Mordaza, constituyendo un precepto tan abstracto que da lugar a un amplio marco de infracciones posibles que no se concretan ni en la misma ley, es decir, te pueden multar por lo que les dé la gana para aumentar la presión coercitiva sobre la protesta social. En este caso se ha aplicado este precepto a nuestras camaradas, a pesar de haber intervenido en el turno de ruegos y preguntas, y de haber desalojado el pleno junto con el resto de compañeras del Encierro Dignidad. Esta acción represiva supone un ejemplo claro del fin propio de la Ley Mordaza.
Desde la UJCE hemos dado a las camaradas todo nuestro apoyo jurídico y nuestra solidaridad en las calles. Haremos todo lo posible para que estas medidas represivas no lleguen a imponerse ni aplicarse . Nuestras camaradas y compañeras no callarán ni dudarán en denunciar las injusticias y los atropellos a los que se somete a la clase trabajadora.
Frente a la represión que siguen sufriendo miles de compañeras, que como Pedro y Alicia, se enfrentan día tras día contra este sistema;
¡Solidaridad, dignidad y lucha!
STOP REPRESIÓN