Publicado el 23/03/2014 en elcrisoldeciudadreal.es
Cansados tras una jornada de viaje a Madrid, participar en una concentración que algunos califican de “histórica” y evitar a los antidisturbios, los ciudadrealeños que hoy han pasado el día en Madrid dentro de las protestas de las Marchas por la Dignidad esperan su momento para coger el autobús y regresar a casa. Ninguno de los ciudadarealeños se encuentra dentro del centenar de heridos y detenidos con los que ha concluido una manifestación cuyas cifras bailarán y mucho a lo largo de la semana, de los 50.000 que cita El Páis, de fuentes policiales, a los 2 millones, que cifra Público de fuentes de la organización.
“Hemos llegado sobre las 14 horas y ahí nos hemos dividido cada uno con su organización”. Quien habla es Javier Heredia, de UJCE Ciudad Real, que ha viajado en uno de los seis autobuses que salían de Ciudad Real, tres de la capital y tres del resto de municipios. En ellos iban estudiantes y personas de sindicatos y movimientos alternativos, desde el STE a la CNT, pasando por el Colectivo de Estudiantes, el Partido del Trabajo Democrático, IU o el Frente Cívico de Daimiel.
En el caso de Heredia se ha unido al resto de su formación, la UJCE, que recibía a la columna, las personas que llegaban a Madrid andando, desde el noroeste, y cuya espera se hacía en la plaza de España de Madrid, junto a varios movimientos sociales. A partir de ahí se han unido a la concentración que subía a Colón, a donde no han podido llegar por la “gente” que había, explica este ciudadrealeño quien sólo ha oído las cargas policiales, “se escuchaban ocho o nueve disparos por minuto de pelotas de goma”,
Quienes sí han vivido de cerca los choques con antidisturbios, han sido los integrantes de la columna manchega, que subía por la zona más cercana a la madrileña calle Génova, donde las personas consultadas explican han comenzado los disturbios al intentar un grupo de personas llevar la protesta hacia la sede del PP. “Nos han ayudado a salir gente de Madrid y éramos un grupo numeroso, unas 150 o 200 personas en la columna manchega”, comenta Darío López, quien veía como se quedaban parados en su marcha hacia Colón con la policía de frente y desconociendo las calles cercanas por las que huir de unas cargas de antidisturbios, que todos los preguntados han calificado de “desproporcionadas”. La huida ha sido hacia atrás, a la fuente de Cibeles.
“La respuesta ha sido abrumadora es una de las mayores manifestaciones de la historia sin contar con las grades fuerzas sindicales”, comenta López, para quien lo de hoy es un ejercicio de demostrar que hay “alternativas”, y “unidad”, apostilla por su parte Matilde Castilla, de STE Ciudad Real.
“Ha sido impresionante y Castilla-La Mancha ha tenido una presencia importante”, comenta Castilla, quien recuerda que la pancarta de esta columna ‘Trabajo, Techo y Pan’, ha recibido elogios reales y virtuales, vía redes sociales.
“Aquí se habla de la manifestación más grande de la democracia”, comenta Heredia, que habla en el momento de la reflexión, antes de volver a subirse al autobús y regresar a Ciudad Real. “Estaba lleno de gente, no se paraba de ver autobuses en Atocha, no parabas de ver gente, banderas, pancartas, no he visto ninguna manifestación tan grande”, explica, mientras apostilla que esto no se tiene que terminar “aquí, con un día en una manifestación no hacemos nada”.
La próxima cita de este 22M es una asamblea en Madrid, ya con los ciudadrealeños de vuelta que tendrán que pensar si parte de lo vivido se lo traerán a Ciudad Real.