Desde la Juventud Comunista queremos mostrar nuestro apoyo a las trabajadoras y trabajadores de la empresa aguileña AGRASA. Esta empresa ha presentado un ERE que afectará a más de 400 trabajadoras, produciéndose los despidos de forma progresiva hasta su cierre definitivo el próximo mes de junio. El conflicto se inició el 27 de noviembre, aun sin conocer la intención de cierre de la empresa, con la convocatoria de huelga indefinida debido al impago de nóminas, algunas de ellas sin cobrar desde septiembre.
Pero no solamente se pretende despedir a las trabajadoras, sino que además el comité de empresa ha denunciado que AGRASA solo accede a pagar las nóminas hasta octubre, ya que manifiesta que no tiene capital suficiente para hacerse cargo del resto de meses.
Es difícil de concebir que una de las empresas más importantes de esta zona, la cual tiene una gran actividad económica alegue la supresión de pagos y el despido debido a perdidos que ascienden a 14 millones. Esto solo puede ser debido a la mala gestión de los empresarios, los cuales, como es típico en este sector, han exprimido la mano de obra a más no poder, han especulado con su trabajo y su proyecto de vida, utilizando y gestionando las ganancias sin el más mínimo cuidado. Una vez más se demuestra la cara más oscura del neo-liberalismo, donde la burguesía sin el más mínimo control por parte de las instituciones es capaz de jugarse el futuro de casi medio millar de personas solo por el afán de beneficio.
Por esto, desde la Juventud Comunista mostramos nuestra solidaridad con este grupo de personas, así como secundamos la huelga ya que la lucha sigue siendo el único camino.