El pasado 2 de mayo nos despertábamos con la noticia de que Ignacio González, presidente de la Comunidad de Madrid entregaba la Medalla de Oro de la Comunidad a Rouco Valera, por la «labor que ha desarrollado por los madrileños desde hace tantos años«. A su juicio, es «un reconocimiento muy merecido, más que justificado«.
“En Madrid sabemos que el conocimiento, la investigación y la innovación son el motor del progreso y de la mejora en todos los aspectos de nuestra vida”, dijo González durante la entrega de las Medallas y condecoraciones del 2 de Mayo, «a las personas e instituciones que han destacado por su servicio a los madrileños y por contribuir al desarrollo de nuestra Región. En especial, este año, el Gobierno regional ha querido reconocer la labor de quienes han contribuido a que Madrid se haya convertido en una región de vanguardia a nivel cultural, científico y social«.
Mientras al presidente de la Comunidad parece que le gustaría seguir en el 2 de mayo de 1808 bajo la consigna de «Dios, Patria y Rey» nosotros y, sobre todo, NOSOTRAS no sentimos que Rouco Varela haya hecho ningún servicio bueno ni útil para las y los madrileños, más bien lo contrario.
Rouco Varela es un cruzado que con actitudes fanáticas se ha dedicado a imponer su moral a la sociedad, con autoritarismo, como está ocurriendo con la Ley del Aborto, con las células madre, con la enseñanza, con el matrimonio homosexual, con la memoria histórica y con la fiscalidad en los bienes de la iglesia.
Por eso y por muchas cosas más Rouco Varela no nos representa y ni él ni un gobierno al servicio de los intereses de la Iglesia son Madrid.